Cuando se habla de regalos personalizados en Madrid centro, de esos que ofrecen las empresas y los comercios a sus clientes, cada vez es más frecuente que se recurra a una memoria USB sobre la que se imprime el logotipo de la empresa que lo regala. Es un regalo de gran utilidad en el que puedes introducir una presentación, los textos de una conferencia, la ponencia de un congreso o, incluso un vídeo promocional de tu negocio. Atrás han quedado ya los tiempos en los que los mecheros eran el regalo más popular. Hoy día, las memoria USB superan ya en número de unidades a los bolígrafos.

Hace solo unos años, apenas una docena, antes de que las memorias USB empezaban a comercializarse, causaron sensación unos mini CD’s algo más pequeños que una tarjeta de visita y fueron muy utilizados como regalos personalizados en Madrid centro aunque su reducida capacidad y la aparición casi simultánea de las memorias USB mandaron al olvido a los mini CD’s.

A punto de terminar el siglo XX una famosa empresa de informática puso en circulación las primeras memorias USB, su objetivo era buscar una alternativa de almacenamiento a los, entonces muy populares diskettes, y a los CD’s y DVD’s. Y hay que reconocer que lo consiguieron. Hoy en día ningún ordenador moderno cuenta con una disquetera y todos tenemos en casa varias memorias USB de diferentes capacidades.

La capacidad de almacenamiento ha sido una de las causas en las que se ha apoyado su éxito. Para que te hagas una idea, en una memoria USB de pequeño tamaño, de 8 GB, se puede guardar información que necesitaría casi 6.000 diskettes de los antiguos.

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